food man person eating
Photo by Gratisography on Pexels.com

Querido humano, sé que estás decepcionado conmigo. Sé que en los últimos tiempos me escondes debajo de ropa holgada y evita la playa.

Me exige una energía que no tengo.

Sus galletas rellenas y refrescos no me dan el apoyo necesario. Me siento abrumado y, lamentablemente, me veo obligado a almacenar energía en forma de grasa.

Sé que te avergüenzas de tu stock de energía, pero lo que me pides, no puedo ofrecerte. Estoy débil.

No descansaré y se sabe cuando fue mi último sueño reparador. Cuando me despierto, no me alimenta y cuando me alimenta, no es de calidad.

Estoy estresado y cerca de un colapso nervioso. Sé que esperas más de mí, pero tengo que ser honesto, también esperaba más de ti.

Me pides foco, energía y menos grasa. Le pido nutrientes, hidratación y descanso. Y como tú, estoy viendo barcos.

Te molesta el intestino encerrado, pero cariño, no estoy en condiciones de hacer nada ahora.

No me pidas que recuerde algo. Mi acción de antioxidantes está bajo, mis membranas celulares sin flexibilidad y la grasa mala que usted consume, acaba conmigo!

Ya no puedo transportar bien el azúcar que tomas y contra mi voluntad, tuve que llamar a mi amiga insulina más a menudo. Si estás mareada y con dolor de cabeza, la culpas. Y usted bien sabe lo difícil que es, cada vez que aparece de forma desordenada estoy obligado a almacenar aún más grasa.

Deja las cremas y los masajes, mi amor. Ya no respondo a los estímulos externos.

Estoy tan nervioso que le pedí consejo al cortisol. Me aconsejó retener el máximo líquido que pueda para protegerme y siempre que sea posible, deshacerme del peso innecesario de los músculos.

Bueno, los músculos son pesados y ya no tengo la capacidad de carga por ahí. He optado por la grasa de mi bien, lo siento. Con la escasez de nutrientes tuve que tomar decisiones drásticas.

Ya no estoy cuidando su piel y pelo, así que usted los verá irse.

Estoy tan nervioso que las cápsulas y suplementos no son absorbidos. Estoy enojado contigo y ahora no quiero más charla. Te estoy escribiendo esa carta como un adiós. Me estoy apagando y luego, la falta de aire será evidente.

Cuanto más me enfermo, pero me agrede con medicamentos y yo, sinceramente, no entiendo por qué me trata así.

Parece que quiere verme sufrir. Como si no fuera suficiente cada año de negligencia, ahora grita a los siete vientos que soy lento, que su metabolismo es lento. Duele!!

Yo nací con algunas imperfecciones, pero imaginaba que usted, con inteligencia humana, sabía cuidar de su cuerpo. Me equivoqué! Usted no prestó atención a las señales y abusó de mí.

Ahora que confié te pregunto, cuando me canse y me vaya, dónde vas a vivir?

Autor desconocido

Anuncio publicitario